
Gigante
Es originario de Italia. Probablemente desciende de los molosos romanos de hace 2000 años; desde entonces se ha utilizado como perro de guerra, policía, guarda y protector y para carga. Aunque es una raza antigua, no fue sino hasta 1946 cuando fue presentado por primera vez en una exposición canina, en Nápoles.
Tamaño: de 58 a 76 cm de altura.
Peso: de 60 a 75 kg.
Orejas: cortadas muy pequeñas.
Cola: corta tres cuartos.
Pelo: corto y liso.
Colores permitidos: gris sólido, negro, caoba y rubio.
Tamaño de la camada: de 10 a 12 cachorros.
Grupo: de trabajo.
Aunque su apariencia es imponente y fiera, en realidad se trata de un perro tranquilo buen compañero para los niños y la familia en general, ya que es afectuoso, sociable, lento en sus movimientos y muy cariñoso: de un lengüetazo puede impregnar de baba toda la cara.
Es territorial, un buen guardián que nunca abandona sus dominios. Se adapta a distintos tipos de climas. Aunque fue criado como perro de combate, no es peleonero con otros perros ni agresivo con las personas, a menos que se sienta amenazado.
A pesar de su gran tamaño y sus movimientos a veces torpes, las hembras son excelentes madres con sus cachorros.
El costo promedio de manutención con alimento comercial es alto, con un consumo diario de 1200 a 1500 g.
Nota: Actualmente los criadores de esta raza llevan un estricto control sobre sus cruzas, para suavizar su carácter y disminuir su agresividad, a fin de garantizar una convivencia armónica y libre de incidentes, tanto con sus dueños como las personas ajenas a la familia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario